domingo, 2 de febrero de 2014

¿Que es el TOC?

Las obsesiones son pensamientos, ideas o imágenes absurdas o exageradamente negativas que le vienen nos vienen a la mente sin que lo podamos evitar y que producen una gran angustia. Las personas muy obsesivas pueden desarrollar un trastorno llamado trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Dichas personas, cuando tienen ideas obsesivas, responden a éstas con compulsiones (actos repetitivos y comprobatorios) o analizando, dándole vueltas y más vueltas a las ideas en un intento desesperado de aliviar la angustia, cayendo así en la trampa de alimentar las obsesiones, que cada vez se hacen más fuertes, ocupando más terreno en la vida de la persona afectada y imitándole más el desarrollo de una vida sana. El obsesivo solo puede salir del laberinto en que se encuentra cuando deje de tenerle miedo al pensamiento sobrevenido y consiga no identificarse con él. Cada vez son más las personas que acuden a consulta psicológica con este problema, en la mayoría de ocasiones asociado ya a problemas de depresión y  trastorno de ansiedad, pues es el trastorno psicológico que produce más sufrimiento en las personas. Los estados de ansiedad pueden producir obsesiones, pero también las obsesiones pueden generar crisis de ansiedad, por lo que muchas veces se pueden producir diagnósticos erróneos con el consiguiente tratamiento equivocado del problema. El TOC no es un trastorno orgánico por lo que el tratamiento con fármacos no soluciona el problema, a pesar que las personas afectadas esperan que éstos sean la solución a todos sus males y pensamientos dañinos. Dicho trastorno es un problemas del pensamiento, una manera de pensar distorsionada, por lo que la psicoterapia cognitiva que trata de modificar y corregir esos errores de pensamiento es a día de hoy la alternativa más eficaz al tratamiento de un problema cada vez más frecuente. Si la persona acepta su problema y está dispuesta a hacer un esfuerzo saliendo de la zona de confort de sus pensamientos obsesivos, el trastorno obsesivo tiene solución. En la terapia para la persona con TOC habrá dos aspectos a tratar: uno, la personalidad obsesiva y otro el TOC propiamente dicho. Éste se genera desde una personalidad obsesiva, siendo ésta el caldo de cultivo que desencadena el problema. Por ello hay una serie de conceptos erróneos que hay que corregir y modificar como son la sobrevaloración del pensamiento (la mente es algo más que el ego-pensamiento), la necesidad de evidencia absoluta ante el mínimo riesgo (pretender controlar las cosas al 100%), el miedo ante los síntomas corporales (hipocondría) y los sentimientos de culpabilidad del pasado o miedo al futuro (no estamos viviendo la realidad del ahora).
La terapia psicológica va encaminada a que los pensamientos angustiosos vayan perdiendo importancia hasta que dejen de tenerla y entonces dejen de hacer sufrir. El obsesivo debe entender y asimilar que es algo más que sus pensamientos; debe aprender, con entrenamiento mental, a dar otro tipo de respuestas a esos pensamientos, desde la serenidad y amplitud mental a través de un entrenamiento psicológico. Eso ayudará a dar una respuesta más global que permita no entrar en el pensamiento absurdo o exagerado que tanto daño causa a las personas obsesivas y ayudará también a no caer en las compulsiones, pues como ya dijimos éstas refuerzan las obsesiones.
Cuando la persona obsesiva consigue no alimentar con compulsiones sus obsesiones éstas se disiparan, tal como se disipan las nubes cuando sale la luz del sol. La persona consigue así salir de la cárcel de sus propios pensamientos y empezar a ver un poco de claridad en su angustiosa existencia.